Desestrésate

Recupera el equilibrio ante una jornada difícil

Por Alma Itzel Balandrano Hernández
Universidad Panamericana

Colegio de Contadores Públicos de México, Gaceta Entre Letras y Números

Imagina que es un lunes a las 5:00 horas. Tu semana va comenzando y ya estás preocupado porque tienes que salir antes de las 5:55 para evitar el tráfico matutino de la Ciudad de México y así llegar a tiempo a tu primera clase (si es que no tienes exámenes o proyectos que presentar). Logras llegar a la escuela y, después de cinco clases, subes a tu auto para dirigirte a tu trabajo y estar otras cinco horas concentrado en tus tareas del día. Finalmente sales del trabajo y vuelves a estar en el tráfico durante una hora más para llegar a hacer tarea y dormir. Sé que todo esto puede sonar abrumador y es por eso que me gustaría compartirte mi experiencia como estudiante y becaria sin perder mi propio espacio y sobre todo mi tranquilidad.

A pesar de la frenética jornada que enfrento a diario, he descubierto la importancia de integrar ciertas actividades clave que me brindan la energía y capacidad necesarias para gestionar mi día de manera eficiente. Así, en este artículo exploro diversas estrategias prácticas para desestresarse y recuperar la calma en medio del caos.

En primer lugar, algo que no puede faltar en mi mañana es poner un pódcast durante mi transcurso a la escuela. Buscar un tema que me agrade y luego escucharlo mientras manejo me ayuda a distraer mi mente del tráfico. Además, aligerar mi día al oír algo nuevo es bueno porque es una manera de convertir en una zona de aprendizaje un momento que muchos pudieran considerar como perdido. Es tu oportunidad para desconectarte del estrés del tráfico.

El segundo punto y, para mí, el más importante, es darte un espacio para hacer ejercicio. No olvidemos que el balance en nuestra vida va a ser aquello que nos lleve a tener una mejor administración de nuestra energía y, por ende, un mejor rendimiento a lo largo del día. Dedicar mínimo 30 minutos diarios a la actividad física puede ayudarte a mantener una fuerte capacidad de concentración y aprendizaje, además de reducir problemas de ansiedad y salud.

Por último, no subestimemos el poder de la convivencia con nuestros seres queridos. Sé que a veces descartar todo lo que no tenga que ver con cumplir nuestros pendientes laborales y escolares parece lo más sensato, pero hacer esto de forma repetitiva puede convertirse en algo perjudicial para lograr todo lo que nos proponemos a largo plazo, ya que aislarnos puede traer sentimientos negativos. El compartir con nuestros seres queridos las presiones que estamos sintiendo, en busca de empatía y consejo, es de las mejores maneras de sobrellevar los sentimientos derivados de lidiar con retos.

En conclusión, las estrategias expuestas en este artículo son tan sólo algunas de las que podrían ayudarte para organizar tu agenda y evitar el estrés de la semana, ya sea por motivos laborales o escolares. Sin embargo, es importante encontrar lo que nos funciona mejor a cada quien como persona, ya que hay miles de opciones disponibles. La clave es encontrar formas de reducir el estrés y disfrutar cada proceso que se presente en nuestra vida.